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Los
avances tecnológicos están a la orden del día, un nuevo móvil,
tabletas, ordenadores, reproductores de música, etc. No cabe duda que en
esta era,
nos estamos adaptando con mucha velocidad a tecnologías que en el pasado nunca imaginamos que podrían ser realidad.
No obstante, no todo es miel sobre hojuelas, pues,
el abuso de esta tecnología, ya está viéndose reflejado en algunos problemas de salud que no serían comunes si no fuese por estos productos.
Sobrepeso y Obesidad
Sí, es verdad,
los problemas de obesidad no son nuevos,
desde siempre ha habido personas que luchan contra problemas de peso,
no obstante, en los últimos años, la obesidad, se ha vuelto un serio
problema de salud mundial, que afecta tanto a adultos como a niños.
Expertos coinciden que
el sedentarismo ha sido clave en el incremento de los índices de obesidad a nivel mundial,
pues día a día, estamos reduciendo la actividad física, el uso de
automóviles, videojuegos, televisión, entre otros dispositivos, han
desplazado actividades que generaciones anteriores solían hacer, como
caminar, o practicar algún deporte de forma recreativa.
Por otro lado
, se ha vinculado la mercadotecnia de la comida chatarra en toda clase de dispositivos,
con el problema de obesidad, y se cree que entre más tiempo estemos
expuestos a estas tecnologías, más tiempo estamos expuestos a este tipo
de publicidad que de forma inconsciente, podría estarnos afectando.
Insomnio tecnológico
¿Te quedas tarde frente al ordenador para trabajar?, ¿Atiendes tu
móvil por las noches? Ó, simplemente ¿juegas o navegas por internet
antes de ir a dormir?, es posible que
estos hábitos estén alterando o bien, y hayan modificado tus hábitos de sueño.
El insomnio tecnológico es cada vez más común, y tiene varias explicaciones, no
solamente
ocurre porque distraemos nuestra mente cuando deberíamos descansar,
sino que, los dispositivos electrónicos emiten un tipo de luz que puede
alterar la producción de melatonina, una hormona involucrada en conciliación del sueño.
Si tenemos el hábito de emplear estos dispositivos durante la noche, es muy probable
que ya hayamos notado problemas a la hora de dormir y sin saberlo, la causa no es otra que el uso de la tecnología.
Problemas visuales
Pasar largas horas de frente a un monitor puede ser un problema para la vista, pues, es normal que se presente
el conocido “estrés visual”, que se caracteriza por síntomas como la resequedad de ojos y cansancio visual, en algunos casos, estos problemas pueden derivar en condiciones más serias como la miopía.
Se aconseja
mantener una distancia prudente entre la pantalla
y nuestra vista de al menos 50 centímetros, y de ser necesario,
utilizar lágrimas artificiales para mantener la lubricación del ojo y evitar la resequedad provocada por la exposición prolongada a los monitores y pantallas.
Consiste en
una neuropatía que ocurre por la compresión de un nervio ubicado cerca de nuestra muñeca,
cuando ocurre, la persona refiere dolor en el área de la muñeca y la
palma de la mano, cerca de la unión del dedo índice y pulgar, en algunos
casos, el dolor puede irradiarse al brazo.
Este síndrome solía afectar sólo afectar mayormente a personas mayores, sin embargo,
con
el uso de las nuevas tecnologías, especialmente teclados, videojuegos y
celulares, puede presentarse tanto en jóvenes como adultos.
Suele corregirse por medio del reposo, terapia láser, ejercicios e incluso acupuntura como alternativa, sin embargo,
algunos casos pueden llegar a requerir de la cirugía.
Problemas de audición
La música y los sonidos intensos se han vuelto nuestros acompañantes diarios,
ya sea que estemos viendo una película y deseamos experimentar todos
los efectos de sonidos para una experiencia más inmersiva, o bien,
simplemente queremos escuchar nuestra lista de canciones favoritas de
camino a casa o durante el trabajo, o estudio, con las nuevas
tecnologías, estamos casi siempre envueltos en sonidos.
Si bien nuestros
oídos pueden soportar estos sonidos,
los
expertos mencionan que pasar horas escuchando música o los sonidos de
los dispositivos como parte de nuestra rutina puede provocar problemas
de audición a temprana edad. Se recomienda que el sonido no
supere los 70 decibeles y en caso de que sea así, es aconsejable que no
sea por un periodo mayor a una hora. Por otro lado, el uso de audífonos
debe ser limitado.
La moderación es la clave
Nadie puede discutir los beneficios de
la tecnología, nos facilitan nuestro trabajo y vida diaria, sin embargo, es importante no abusar de ellas, pues puede ser perjudicial para nuestra salud y tener graves consecuencias en un futuro.
Lo mejor es
limitar nuestro uso de dispositivos electrónicos
durante el día, procurar utilizarlos respetando nuestros horarios, y
educar a los más pequeños para que puedan hacer uso de estas tecnologías de forma consciente.
Además, se aconseja
fomentar otro tipo de actividades de entretenimiento, como las caminatas y deportes al aire libre.
Por último,
es importante el descanso, dormir bien, hacer pausas en periodos prolongados de exposición a los distintos tipos de dispositivos tecnológicos, es una útil opción.
