Esta receta es original, fácil y rápida de hacer.
Esta especialmente indicada para tomar en los calurosos días del verano ya que nos ayuda a eliminar la sed y reduce el dosha pitta (alterando en esta estación).
Estas son las propiedades que le aporta cada uno de los ingredientes que contiene:
La sal y la panela nos ayudan a recuperar los minerales que perdemos con
la sudoración. La lima o limón ayudan a depurar la sangre (efecto
astringente y frío) y mejoran la digestión activando las encimas
digestivas (agni). El comino también potenciara este efecto, además le aporta un sabor distinto que combina muy bien con el resto de ingredientes.
Es una receta típica de la India,
principalmente del Norte. Dependiendo de la zona puede llevar
ingredientes como triphala o semillas de amapola. Pero yo he elegido una
receta muy sencilla.
Ingredientes (para 4 personas):
2 limas o 1 limón grande
4 vasos de agua fresca
½ cucharadita de comino en polvo
½ cuchadadita de sal rosa del Himalaya o sal marina sin refinar
2 cucharaditas colmadas de panela (puedes poner más o menos según tu gusto)
10 o 12 hojas de hierbabuena o menta
Una pizca de cardamomo
Exprime las limas (si puedes conseguir limas es preferible usarlas en esta receta, el sabor es más agradable) o los limones.
Pica muy finas o aplasta en el mortero la mitad de las hojas de menta
para que desprendan su sabor. Reserva un par de hojas para decorar.
Coloca todos los ingredientes en una jarra y mézclalos bien.
Sirve en vasos de cristal y decora con la menta y una rodaja de lima.
Es importante que incluyas todos los ingredientes para que la receta
este equilibrada y tengas sus beneficios. Pero puedes modificar las
cantidades a tu gusto, Por ejemplo si el sabor del comino te resulta
fuerte prueba a poner la mitad.
Consejo: Evita las bebidas y comidas muy frías o heladas. Aunque con el calor nos apetezcan bebidas o alimentos fríos Ayurveda los desaconseja ya que interrumpen y dificultan la digestión que es un proceso de calor.
Aunque parezca contradictorio el cuerpo se refresca más con alimentos
calientes e incluso picantes, ya que estos nos hacen sudar. Los
alimentos fríos solo nos proporcionan un alivio pasajero y obligan a que
nuestro cuerpo tenga que generar mayor calor interno para poder hacer
de forma correcta la digestión.
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