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¿Irritable? ¿Enfermizo? ¿Cansado o distraído todo el tiempo? ¿No puedes dormir y te sientes deprimido? El estrés se puede manifestar de muchas formas en el cuerpo y en nuestra vida. Realmente no es algo malo, es un indicador que nos dice que hay cierto temor a que sucedan o no sucedan ciertas cosas.
El estrés avisa una cosa: que te estas resistiendo.
Y esto sucede cuando sientes que algo o alguien puede interferir, bloquear o disminuir tu flujo de amor, aceptacion, dinero, trabajo, salud o lo que sea que consideres importante o sencial en tu vida.
Si te resistes a que algo no suceda, o quieres desviarlo de hacia donde va, entonces el estres empezara, y a medida que te resistas o quieras desvialo, el estres aumentara.
Estrés es igual a tener miedo. Confiar es el remedio.
Y aprender a confiar es una de las tareas más arduas y profundas que hay. Tener paz es uno de los mayores logros espirituales.
Primer secreto para aprender a confiar y usar nuestra energia:
DETECTA EL TIPO DE ESTRES QUE TIENES
Aprende a reconocer y detectar tu estrés. Si no detectas tu estres y lo aprendes a observar, no tendras material para trabajar. Hay dos tipos de estres: el de lucha o el de huida.
Un estres de lucha es : tratar de cambiar las circunstancias externas (actitudes, pensamientos, formas de ver de los demás, etc.) con todo lo que podemos: confrontar, gritar, discutir, manipular, querer dominar al otro con el punto de vista, manipular, etc.
Un estres de evasion o huida es: cerrarnos, no querer escuchar, no querer ver, indiferencia, apatia, distanciamiento emocional, depresión, sensacion de soledad, ausencia, aislamiento social, etc.
Síntomas que avisan que el estres ya es fuerte y grave: enfermedad, reaccionar con fuerte violencia o ansiedad, dolores de todo tipo, irritabilidad constante, sensacion de desconexión y abandono, depresion crónica, limitación, violencia y agresión, intolerancia, etc.
Si tienes alguno de estos sintomas, es que te estas resistiendo a que algo sea como es.
Trata de detectar todas las situaciones donde sientas te estas resistiendo o quieras cambiar algo a tu forma de ver o ser, es decir, donde digas o pienses cosas semejanes como: “Esto no debe de ser asi”, “Deberia ser de otra forma” “Es injusto” “Por su culpa”, “NO voy a tolerarle esto”, etc. Escribe las situaciones y menciona a las personas involucradas. Es muy importante que detectes que tipo de estres tienes para poder trabajarlo.
Segundo secreto:
OBSERVA LA FORMA EN COMO HABLAS O PIENSAS:
Haz este ejercicio: Lee estas frases e intenta decirlas despacio mientras las sienes.
“¿Estaré haciendo lo correcto?” “Por su culpa, mi vida perdió sentido”, “¿Y si no lo logro?”, “¿Y si me quitan el trabajo?”, “Es un infeliz, ¿cómo pudo hacerme eso?”, “Nadie me valora ni reconoce, son todos unos indiferentes” “¿Y si se va y me deja solo?”, “No le pondre atencion si se enoja o me vuelve a decir eso” “Odio estar asi” “¿Y si esta enfermedad es incurable?” “Me tiene harto este dolor” …. “¿Qué voy a hacer sin ti? “Nunca me prestas atención ni me escuchas” “Nunca tengo dinero para lo que quiero” “No se como voy a solucionar esto”… “¿Y si se acaba el mundo?”
Ahora bien:
¿Las has dicho despacio? … ¿Y que has sentido?
Estres. Si te fijas, en todas estas frases hay una sensacion de resistencia a que algo sea como es, o a que no vaya a ser o haya sido como esperas o esperabas que fuera.
Ahora observa durante un dia o dos los pensamientos que pasan con mas frecuencia por tu cabeza, y anotalos de ser posible.
Tercer secreto:
CAMBIA LA FORMA EN QUE VES Y PIENSAS LAS COSAS.
Podríamos mencionar una larga lista de frases y pensamientos que conectan con el estrés. Pero para muestra un botón: si te fijas bien, todas las cosas que piensas o dices y te causan estres, es porque en el fondo hay una sensacion de impotencia, de no poder cambiar algunas circunstancias, de miedo a que no sucedan ciertas cosas, de insatisfaccion, de enojo y frustración. Y esto impide que tu energia fluya de forma armonica y te sientas tenso y bloqueado.
Ahora bien: lo que dices y piensas son solo eso: palabras y pensamientos. Y las palabras y los pensamientos se pueden cambiar. Y es ahi donde empieza el flujo de tu energia creativa a tomar un rumbo diferente en tu vida: cuando piensas y hablas.
Cuando piensas algo o dices algo, esto genera una química en tu cabeza que se va instalando en tu cuerpo, hasta que lo sientes con varios síntomas y emociones.
Por ejemplo,
Alguien que teme perder su trabajo o teme no tener dinero o fracazar. Esta pensando todo el tiempo en que no quiere que suceda eso, y empeiza a sentir temor o resistencia. Entonces empieza a no poder disfrutar la vida ni sus detalles porque todo el tiempo esta atrapado en el discurso de lo que debe hacer, se pone de mal humor si alguien le distrae de lo que piensa es esencial para sobrevivir (de su trabajo o sus planes). Empieza a distanciarse de su familia, con la pareja, los amigos, porque esta muy ocupado tratando de que no suceda lo que no quiere que suceda. Entonces empieza a sentrise solo, ansioso, desconectado, y esto le provoca impaciencia… “¡A qué hora va a suceder lo que me de paz!” y si no sucede entonces la tensón aumenta, la ersona puede no darse cuenta, pero deja pasar cantidad de detalles y tiempo por estar resistiendose a que no pasen ciertas cosas.
La tension y el estrés suceden cuando se esta preocupado por lo que no quieres que suceda, en lugar de ocuparte de lo que quieres que suceda.
Y entre mas lo hagas asi, mas la tensión crecera y el cuerpo empezara a manifestarlo en dolores, enfermedades, tics, problemas de piel, llanto incontenible, carácter muy reactivo y vulnerable ante todo, etc.
Hay síntomas más severos y a los que el cuerpo se puede acostumbrar cuando piensa en cosas que no quieres que sucedan:
- Ansiedad, nerviosismo, insomnio, depresión, angustia, fobias, intolerancia, agresión, desesperación, violencia, enfermedades de todo tipo, etc.
Ahora bien. ¿Quieres paz? Entonces empieza a enfocarte en lo que si quieres que suceda, y no en lo que no quieres que suceda.
Ahi esta la clave.
Observa:
Cierra tus ojos, respira profundo, date un tiempo de cinco minutos para relajar tu cuerpo y concentrarte en tu respiración. Luego, lee las siguientes frases despacio, sintiéndolas, como si estuvieras convencido que todo lo que digas a partir de este momento se va a hacer realidad y tuvieras un verdadero dominio de tu palabra y tu sentimiento.
“Estoy haciendo lo correcto.”, “Mi vida está cambiando a algo más grandioso.”, “Confío en que lo lograre.”, “Siempre encontrare trabajos grandiosos con buena paga.” “Todo sucede a su tiempo, yo tengo dominio de mi tiempo” “Aprendo cada día de las cosas que me pasan, para así atraer cosas y personas más grandiosas en mi vida” “Quizá nadie lo note, pero yo en verdad siento admiración por mi trabajo, por lo que he logrado” “Siempre estaré rodeado de personas que en realidad me entiendan y me ayuden a comprenderme mejor. Me gusta estar conmigo y aprendo cada día a disfrutar lo que soy” “Mi cuerpo siempre responde a mi energía de entusiasmo, y veo ahora un cuerpo fuerte y sano, y así será” “Siempre hago lo mejor que puedo, y el camino se abre solo a mi paso, mostrándome las mejores oportunidades” “Siento que se aleje de mi, en verdad. Pero se que nada es a la fuerza, y si mi camino no es fluido hacia este destino, suelto lo que no es para mí y permito que la vida me lleve a mi mejor suerte” “Los demás solo me reflejan el amor que siento por mí, si no veo amor a mí alrededor, ahora aprendo a quererme más y a valorar en verdad lo que soy” “Confío en que mi abundancia cada día crece, hoy es un día nuevo y seguro está lleno de sorpresas grandiosas. Esperare este día una gran fortuna, y me merezco las mejores cosas de la vida”. “Y no me importa si mañana se termina el mundo. Sembrare un árbol hoy”.
Ahora bien. Después de leer estas frases con verdadera convicción… ¿Qué sentiste?
Si observas, el estrés es solo una actitud ante la vida, una forma de pensarla, pero cuando observas y piensas la vida de otro modo, tu sentimiento cambia, te relajas, te sientes animado.
Cuando piensas en lo que quieres que suceda y asi hablas, entonces la calma empezara a instalarse en tu cuerpo.
Así empieza todo en nuestras vidas: con la actitud. No se trata solo de un pensamiento positivo. Se trata de que generes una convicción profunda con lo que piensas respecto a la vida, y que lo conectes con tu cuerpo hasta sentirlo.
Las convicciones que tienes ahora de resistencia o incredulidad o apego pueden empezar a modificarse si tienes paciencia y voluntad por hacer crecer cualquier pensamiento que elijas. Así que, para que tu flujo de energía se vuelva más brillante y poderoso, empieza por elegir pensamientos y palabras que te hagan fluir hacia lo que quieres, y no que te saboteen o te obstaculicen lo que quieres.
Date algunos momentos del día para hablarte con frases de poder, y si te descubres hablando o pensando en contra de lo que quieres, solo sustituye tu penamiento o tu palabra por la que si deseas manifestar. Todo es cuestion de paciencia y practica, porque muchas veces es difícil parar el parloteo de la mente que nos agobia con sus creencias y actitudes que no nos sirven sino para vivir limitados y temerosos: estresados.
Si tienes una mente que discute y bombardea con pensamientos temerosos, y sin un propósito sincero y un sentimiento de grandiosisdad que sea integro con tus planes creativos de vida, no luches con ella. Solo sustituye los pensamientos y las palabras, esa es la clave. Sustitúyelos hasta que los sientas como una convicción circulando con más fuerza cada vez en tu cuerpo. Y sin duda los veras pronto circular en turealidad.
En tu mente inicia la realidad que está por venir. Y si no lo crees, es porque nunca lo has hecho tu verdad. La práctica te puede dar grandes sorpresas y realmente no perderas nada sino la duda, si lo intentas.
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